Las siete semillas de David Fischman
El secreto de las Siete Semillas de David Fischman tiene una lección especial que no llega a la película. Cada semilla aporta un conocimiento que podría aplicarse a nuestra vida.
La semilla maltratada
Esta significa el autoconocimiento. El maestro le otorga a Ignacio una simiente golpeada que nunca germinaría. «La enseñanza de la primera semilla era el autoconocimiento. Tú has visto la importancia de entender tu pasado para entender cómo reaccionas y actúas en tu presente».
Mimosa púdica
La segunda semilla habla sobre la energía vital y la importancia de la reflexión. «Ante la actividad, la planta se esconde en sí misma, se aisla y busca su paz interior. Nosotros los seres humanos, deberíamos hacer eso por lo menos una vez al día: ponernos en contacto con nuestra energía interior«.
La rosa
Simboliza el ego. «La rosa es hermosa; cuando abre sus pétalos exhibe una estructura armónica que seduce y tiene una maravillosa fragancia, pero solo la puedes admirar de lejos. Si te acercas mucho, te hinca. Lo mismo ocurre a las personas que están manejadas por su ego. Dedican su vida, como las rosas, a buscar admiración, prestigio, estatus y aceptación. Pero cuando te les acercas, terminan hincándote con su egoísmo».
El mango
Esta semilla está relacionada a la vocación de servicio. «El árbol de mango nos da el sabio mensaje de la importancia del servicio desinteresado…El servicio es lo opuesto al ego. Hacer servicio desinteresado es pasar por encima del ego, es sacarse los lentes de espejo y descubrir cómo podemos ayudar a las otras personas».
El girasol
Esta semilla está relacionada a la luz, a la ética que debe gobernar en nuestras vidas. «El girasol nos recuerda que no interesa a qué circunstancias o problemas nos enfrentamos en la vida.. siempre debemos orientar nuestras decisiones hacia la luz. Debemos buscar siempre que la luz ilumine en nuestro camino».
El pino
A través de esta semilla se busca que la persona tenga un equilibrio en su vida. Que no priorice una tarea por encima de otra. «Es un árbol perfectamente simétrico. Esto le da un excelente equilibrio…el mensaje de sabiduría que encierra el pino es el perfecto equilibrio en la vida. Nosotros, como el pino, también tenemos ramas, es decir, los diferentes papeles que jugamos en la obra de teatro de nuestra vida…debes tratar de equilibrar cada rama o papel que juegas en tu vida logrando el balance perfecto.»
El árbol del junco
La última semilla sobre la capacidad que debemos tener para adaptarnos a cualquier circunstancia. «Este árbol tiene la particularidad de ser totalmente flexible…Nos dice que en la vida debemos tener la libertad de adaptarnos a los vientos de cambio…por otro lado los humanos debemos ser como el junco, libres y no arraigados a lo superficial, a los bienes materiales, a las formas. Nuestro arraigo debe estar solo en las profundidades de nuestro ser, en lo más importante que tenemos, en lo que nunca cambia, en nuestro espíritu».